No tengo perdón de Dios

Hoy los engañé.
Llevaban dos días, desde el rapado, montando un cirio de mucho cuidado cuando me iba y a las 7:15 no es plan.
Hoy me preparé, fregué el suelo, los saqué, y cuando volvimos a casa, yo, como si nada, preparé la basura (ya sé que hay que bajarla de noche, pero me es más fácil por la mañana)
Abrí la puerta (quité la llave) y como si estuviese loca, les puse la comida, y me fui.
Por lo menos hoy no lloraron, mientras tiraba la basura y me metía en el coche.
No tengo ni idea de la que montaron luego, pero yo no los oia. Mañana me lo dirán mis adorables vecinos.

Sí tienes perdon, si se portan mal y ademas los perros no van tan a su bola como los gatos, es decir, que comprenden más claramente el mensaje... que se aguanten lechuga un poquito, o si fuera un hijo tuyo no le ibas a regañar por ponerse rebelde?

Seguro que así se han quedado más tranquilos porque comieron ys egurod espués a dormir un ratito... Hay que buscar los medios.